El nervio vago o nervio neumogástrico es el décimo nervio cerebral. Su buen funcionamiento puede mejorar nuestra salud fortaleciendo nuestras defensas frente al estrés.
Durante mis años en consulta, me he dado cuenta de la importancia de trabajar con reflexología podal este nervio. Al trabajarlo con una técnica especifica facilitamos el equilibrio de muchos órganos de nuestro cuerpo, ya que este nervio es uno de los más largo de nuestro organismo. Concretamente, va desde el cerebro hasta el colon, incluyendo los pulmones, el corazón, el estómago y el intestino delgado.
Por otra parte, el nervio vago envía continuamente información sensorial sobre el estado de nuestro órganos al cerebro. Es una parte importante del sistema nervioso parasimpático que interviene en la respiración, la función digestiva, la frecuencia cardíaca y tiene una gran influencia sobre la salud mental.
Te recomendamos esta técnica si te estás tratando, con tu médico o profesional de la salud, el estreñimiento, las malas digestiones, desórdenes de ansiedad, dificultad para tragar, ronquera, migrañas, obesidad, subidas repentinas en la tensión arterial, estrés, cambios de humor, adicciones, síndrome de fatiga crónica o la fibromialgia.
Por eso, cuando acudas a tu cita con tu Reflexólogo/a… ¡no olvides pedirle que te trabaje este nervio! Como ves sus beneficios son impresionantes, aplicando reflexología podal aumentará el tono vagal y además te ayudará con cualquier tratamiento médico que estés realizando.
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